En una jugada que refuerza la narrativa de BTC como activo de reserva, el Banco Nacional Checo (BNC) anunció una compra experimental de Bitcoin. El objetivo de esta inversión regulada es evaluar el rendimiento de este activo digital. La operación asciende a un equivalente de $1 millón, distribuido entre varios activos basados en la blockchain.
De acuerdo con las autoridades del banco central checo, además de BTC se invirtió en monedas estables y otros tipos de tokens. Según el reporte oficial, este proyecto tendrá un período de experimentación de tres años. Durante ese tiempo, el banco busca adquirir experiencia en los procesos asociados al manejo de activos digitales, más allá de perseguir un incremento inmediato en su actividad de inversión.
La mayor parte de los fondos se destinó a la compra de Bitcoin, informó el BNC. También se adquirió una porción en stablecoins respaldadas por el dólar estadounidense y en un depósito tokenizado. Más allá de esto, las autoridades no revelaron detalles adicionales sobre intermediarios o mecanismos específicos de compra, limitándose a señalar que la adquisición se realizó mediante un exchange.
Según el informe, al finalizar el período de tres años el banco central aspira a contar con plena capacidad para la compra, custodia y gestión de activos digitales. En última instancia, esta compra experimental tiene como objetivo preparar al BNC para la potencial integración de BTC en sus reservas en el futuro.
Una compra de Bitcoin con objetivos claros
Esta prueba piloto de compra de BTC y otros activos cripto por parte del BNC responde a objetivos muy definidos. No se trata solo de adquirir experiencia operativa; también busca evaluar el rendimiento, los procesos administrativos, la gestión de riesgos, las contingencias y los requisitos regulatorios asociados.
Todo apunta a que el banco se está preparando para compras mayores en el futuro, aunque esto sigue siendo especulativo. Por ahora, la institución aclara que estos tokens no forman parte de sus reservas estratégicas internacionales y que no planea aumentar la exposición durante los tres años que dura la prueba.
Tras analizar la propuesta, la directiva del BNC aprobó formalmente la iniciativa el pasado 30 de octubre. Argumentan que esta prueba es necesaria ante el rápido crecimiento de la adopción de Bitcoin por parte de empresas y entidades en todo el mundo. Esto obliga a los bancos centrales a comprender en profundidad los procesos involucrados en el manejo de activos digitales.
En diversos países, actores políticos presionan a sus gobiernos para considerar la compra de Bitcoin como parte de las reservas nacionales. No obstante, son pocos los bancos centrales que han mostrado disposición a evaluar esta posibilidad de manera formal.
