La caída de Bitcoin se agrava mientras las criptomonedas de baja capitalización alcanzan mínimos de cuatro años

Los mercados globales de criptomonedas están bajo fuerte presión tras una brusca caída en el valor de Bitcoin, lo que ha dañado el sentimiento en todo el sector. Los precios están devolviendo la mayor parte de las ganancias obtenidas a principios de año, mientras que los tokens más pequeños caen a mínimos de varios años. Los inversores están reevaluando el riesgo, los volúmenes de negociación se están reduciendo y varios analistas advierten que aún son posibles nuevas caídas.

La caída de Bitcoin se profundiza tras liquidaciones en octubre que borran miles de millones en apalancamiento

Bitcoin cayó por debajo de los $94,000 el viernes, apenas días después de haber bajado de los $100,000, borrando casi todo el progreso logrado desde enero. Como era de esperar, la caída generó una ola de preocupación entre los traders que suelen depender del momentum para tomar decisiones.

Observadores del mercado señalan que la tendencia bajista comenzó cuando muchos inversores se apresuraron a vender a medida que se propagaban las preocupaciones económicas. Las ventas forzadas luego aumentaron la presión, ya que los traders cerraron posiciones que ya no podían soportar las pérdidas.

Según Alessio Quaglini de Hex Trust, la reacción en cadena se remonta al 10 de octubre. El aumento de las tensiones geopolíticas entre Estados Unidos y China llevó a los inversores a salir de los activos de riesgo. Poco después, liquidaciones en cascada eliminaron miles de millones en operaciones apalancadas. Quaglini describió la venta masiva como un “reinicio de liquidez”, señalando que el sentimiento hacia Bitcoin en sí no se había desplomado.

Aun así, las consecuencias se propagaron rápidamente. Ether ha caído más de un 35% desde su pico de agosto de $4,954, y el mercado en general se debilitó junto con ella.

Aunque las tensiones entre Washington y Beijing se han aliviado, Bitcoin sigue atrapado en un entorno frágil. Peter Chung de Presto Research dijo que la liquidez se ha mantenido escasa desde el crash de octubre, lo que provoca que incluso operaciones modestas muevan los precios de forma brusca. También planteó la posibilidad de que el patrón de ciclo de cuatro años de Bitcoin esté perdiendo impacto a medida que las presiones económicas generales toman fuerza.

Reversión de ETF y tensión geopolítica empujan a Bitcoin hacia mayor volatilidad

Las preocupaciones económicas persisten, lo que pesa sobre el sentimiento de los inversores respecto a la perspectiva general del mercado. Las expectativas de una baja de tasas por parte de la Reserva Federal en diciembre se han desvanecido y la incertidumbre ha crecido tras el reciente cierre del gobierno de EE.UU., que retrasó la publicación de datos clave. Tim Sun de HashKey dijo que el contexto más estricto ha golpeado especialmente fuerte a los fondos cotizados (ETF) de Bitcoin.

Estos productos atrajeron más de 100 mil millones de dólares poco después de su aprobación, pero los ingresos se han desacelerado significativamente. En las últimas semanas, el dinero ha comenzado a salir de los ETF en lugar de ingresar.

La creciente cautela está influyendo en el comportamiento tanto de los traders minoristas como institucionales. Los analistas predicen que es probable que haya más volatilidad a medida que los mercados lidian con los efectos combinados de la baja liquidez, las preocupaciones por las tasas y las condiciones geopolíticas sensibles.

Varias fuerzas continúan dando forma a la tendencia bajista:

• Los inversores están vendiendo activos de riesgo tras las tensiones entre EE.UU. y China.
• Las liquidaciones forzadas están aumentando las pérdidas a medida que se deshacen posiciones apalancadas.
• Los bajos volúmenes de negociación permiten que pequeñas órdenes muevan los precios bruscamente.
• El sentimiento del mercado se debilita a medida que se desvanecen las expectativas de bajas de tasas.
• Los ingresos a los ETF se están revirtiendo, sumando presión adicional a Bitcoin.

Quaglini advirtió que Bitcoin aún podría caer hasta los $70,000 si los mercados bursátiles se debilitan aún más. Jeff Mei de BTSE coincidió con esa visión, señalando que Bitcoin sigue comportándose como un activo de alto riesgo. Agregó que las dudas sobre las valoraciones en los sectores tecnológicos de rápido crecimiento y la incertidumbre en torno a la política de tasas de interés dejan al mercado cripto expuesto a retrocesos más profundos.

A pesar de estos riesgos, varios analistas enfatizan que la actual tendencia bajista no se parece a la crisis de 2022. Quaglini dijo que no hay una ola de quiebras ni grandes fracasos de préstamos extendiéndose por el sistema. Espera que Bitcoin se recupere y potencialmente alcance nuevos máximos en los próximos 12 a 18 meses, una vez que mejoren las condiciones generales.

Los traders minoristas se vuelcan a monedas de calidad mientras el mercado de baja capitalización profundiza su caída

Si bien Bitcoin y Ether dominan la mayoría de las discusiones, los tokens más pequeños están bajo una presión aún mayor. El índice de MarketVector que sigue a 50 activos cripto de baja capitalización ha caído a su nivel más bajo desde 2020. Muchas de estas monedas alguna vez se dispararon durante fases alcistas, atrayendo a traders en busca de ganancias rápidas. Ese impulso se desvaneció el año pasado cuando los reguladores estadounidenses aprobaron ETF para Bitcoin y Ether, atrayendo la atención institucional hacia los tokens más grandes.

La debilidad en los tokens de baja capitalización ahora está generando desafíos para los emisores de ETF. Aproximadamente 130 solicitudes vinculadas a monedas cripto más pequeñas siguen pendientes ante la Securities and Exchange Commission. 

Las condiciones actuales del mercado hacen menos probable que la aprobación se traduzca en ingresos significativos. Un ETF vinculado a Dogecoin, listado en septiembre bajo el ticker DOJE, no ha registrado ingresos desde mediados de octubre. Dogecoin en sí ha caído un 13% en el último mes.

En los últimos cinco años, el índice de baja capitalización ha caído casi un 8%, mientras que las monedas principales han subido aproximadamente un 380%. Pratik Kala de Apollo Crypto dijo que los traders minoristas están comenzando a reconocer que no todos los tokens se recuperan durante las recuperaciones. “La marea alta no levanta todos los barcos, solo los de calidad”, afirmó.

El crash de octubre borró más de 1 billón de dólares en valor de mercado y desencadenó aproximadamente 19 mil millones de dólares en ventas forzadas. El apetito por el riesgo aún no se ha recuperado y muchos traders están evitando las monedas más especulativas mientras esperan señales económicas más claras.

De cara al futuro, Chung aconsejó a los inversores minoristas evitar intentar predecir los movimientos a corto plazo y, en cambio, considerar comprar en pequeñas cantidades a lo largo del tiempo. Sun dijo que los compradores a largo plazo deberían monitorear las condiciones monetarias globales en lugar de los patrones de los gráficos, argumentando que la próxima recuperación de Bitcoin dependerá de una mayor liquidez a nivel mundial.